Montag, 19. März 2012

Sun spots

Hace unos días, salió el sol. Quien no haya vivido en el norte de Europa no entenderá del todo el efecto que tiene ese primer día de sol en el carácter y el estado de ánimo de la gente. De pronto, sentí unas ganas irrefrenables de salir a la calle, cuando por costumbre me contento con sentarme en la esquina de la costura y ver pasar a la gente embutida en abrigos por delante de mi ventana.




No sé de quién es este gato naranja, sólo que anda por el vecindario y a menudo lo veo durmiendo en el banco de un jardín cercano. Me acompañó parte del camino.





Pleated coin keeper purse, del libro Style Stitches. Usé un trocito (diminuto) de mi nueva tela Sun Spots, y una tela japonesa de rosas a juego. Para el forro utilicé la misma tela japonesa pero en blanco. En los foros he leído que muchas personas han hecho este monedero y se han saltado el bolsillo interior; yo decidí hacerlo tal y como viene en el libro y, la verdad, el bolsillo funciona más bien como un separador puesto que queda separado del forro interior, que también tiene un pliegue. Sin embargo, no viene mal el separador porque así te cabe el móvil en un lado, y un espejito y barra de labios en el otro.
Es un monedero curioso, aunque la apertura es bastante pequeña y la cremallera (estoy empezando a odiar ponerlas) la hace más pequeña aún. Pero no importa, yo puedo meter la mano sin problemas y la persona a la que le voy a regalar el monedero tiene las manos más finas que yo.

Freitag, 16. März 2012

Origami bag

Hace unos siete meses me compré el libro Style Stitches después de pensármelo mucho y leer todo tipo de comentarios en internet sobre la dificultad de los proyectos. Las fotos, el diseño, los colores... era demasiado bonito para decir que no, así que decidí hacerme con él, a pesar de tener muy poca idea de costura. El libro, por razones que ahora no vienen a cuento, llegó por correo, fue examinado cuidadosamente y depositado en la mesita de noche, donde pasó todo el invierno acumulando polvo. De vez en cuando lo abría, lo hojeaba y lo dejaba en la mesita de nuevo, pensando que no iba a ser capaz nunca de coser uno de esos bolsos.


A veces, el secreto del éxito está en no pensarse las cosas mucho. Un día, fui al almacén de telas, compré la tela, rescaté la máquina de coser de las profundidades del armario, y me puse manos a la obra. Empecé, como no podía ser menos, con un proyecto intermedio, el "Perfectly Pleated Clutch" que salió razonablemente bien (a pesar de ser mi primera cremallera). Lo único que no me gusta de este patrón es que usa cantidades astronómicas de tela, porque va fruncida.


De ahí a contemplar el resto de los patrones como factibles, incluso fáciles, había sólo un paso. "Si he sabido hacer esto... pues aquello no se me puede resistir". Así que esta semana he sacado unas telas de Amy Butler que pedí hace tiempo y que tenía guardadas en un cajón (mirándolas de vez en cuando, acariciándolas, soñando con todas las cosas que iba a hacer con ellas...) y les metí la tijera.
No hay nada comparable a ese primer tijeretazo.


El estuche "Origami Bag" viene en seis tamaños diferentes y está catalogado como "para principiantes". En efecto, no tiene mayor dificultad que la que implica poner una cremallera. Y pegar fliselina (me las apañé, de nuevo, para usar una demasiado fina). Y romperse la cabeza pensando en las decenas de combinaciones de colores y telas posibles. Una para el panel exterior grande, otra para el pequeño, y otra para el forro.

 
Usé una tela de la serie Midwest Modern. Tuve que deshacer la cremallera porque los paneles laterales no me cuadraban. A la segunda vez, ya no tuve que mirar las instrucciones.
Usé el segundo patrón en tamaño, el "mini" (hay x-small, mini, small, medium, large y x-large). Con todo y con eso, me salió grandecito. Para un estuche de lápices es mejor usar el x-small.


¿Para qué va a ser el estuche? Eso es lo de menos. Para llevar una labor de reserva en el bolso, posiblemente.

Dienstag, 13. März 2012

Envío de telas



El sábado pasado llegó este paquete, que pedí el 18 de febrero. La espera se había hecho casi insoportable. La empresa se llama Quiltzauberei, una compañía online alemana que tiene todo tipo de telas y, sospecho, suministra cantidades enormes de material a toda Alemania. Lo curioso es que no fueron las telas lo que retrasaron el paquete, sino el patrón, el "Sidewalk Satchel" de Anna Maria Horner. Se les había acabado y hubo que pedirlo a otro sitio. Las chicas me tuvieron al tanto por teléfono y se lo tomaron todo con mucha filosofía. La próxima vez que necesite fliselina la voy a pedir allí, tienen exactamente el tipo de rellenos que figuran en los patrones americanos.
La tela es de Amy Butler, un surtido de diferentes diseños: la marrón es Trailing Cherries (mi favorita, creo que haré un Blossom Bag con ella). Las de puntos son Sunshine Spots y Tangerine Spots. La amarilla y la roja con flores son de la última colección, creo que se llama Lark. La azul de flores es más antigua, se llama Water Nigella. Los nombres son geniales, ¿no?

Mittwoch, 7. März 2012

Proyecto en marcha: La Manta de Van Gogh

¿Qué diría Van Gogh si levantase la cabeza?





Estoy trabajando en una manta de croché usando, en la medida de lo posible, los colores favoritos de Van Gogh: una gama de azules que va desde el turquesa que utilizó para pintar los ríos hasta el azul marino de su famoso Cielo Estrellado, pasando por el celeste y el azulón que empleó en muchos de sus cuadros. También uso algunos verdes, aunque es difícil dar con el tono preciso (el tono exacto de verde siempre es difícil de encontrar, no sé por qué), algún rojo fuerte como el utilizado en los Girasoles Rojos, el lila de la Habitación del Artista... Y no puede faltar el amarillo, muy claro como el que usa para pintar las estrellas, o el oscuro (casi color mostaza) de los pétalos de los girasoles, por no hablar del amarillo ocre de los campos de trigo.
Como quiero una colcha de punto apretado, que no se quede muy suelta y que sirva para taparse las rodillas en invierno (en este país tan frío donde no hay braseros), uso un diseño bastante denso, de cuadrados concéntricos con espigas en las esquinas que, a su vez, hacen referencia a las escenas de cosecha que Van Gogh pintó.

Montag, 5. März 2012

"Grab and Go" Diaper Clutch


Este patrón lo compré hace dos años por internet, en la página de Jennifer López (no la cantante) "Sew Fun". No me costó muy caro, creo que con gastos de envío se quedaba en diez euros (ahora está rebajado, además). Es un bolso para meter los pañales, unas toallitas de paseo y lo justo para cambiar al bebé. Lleva un cambiador a juego con la tela del bolso. Un proyecto algo caprichoso que, además, luce mucho porque lleva un gancho tipo carabina y un cierre magnético, además de ir forrado por dentro con fliselina.
Fueron precisamente esos detalles complicados los que me impidieron hacer el bolso hasta que, organizando el estudio un día de estos, desenterré el patrón y me dije a mí misma: "Esto lo haces tú, mari".
Primero lo hice con fliselina finísima y me salió un churro. Es el problema de vivir en Alemania y usar patrones americanos: no sabes dónde encontrar los materiales y, cuando por fin los pides, acabas llevándote lo que no es.


Así que deshice (con gran dolor de mi corazón, pero así se aprende) todo el bolso, las tres capas con sus tres fliselinas, quité el cierre metálico, abrí todas las costuras y lo planché todo añadiendo la fliselina voluminosa que recomienda la diseñadora.
Hubo un momento de desesperación al intentar darle la vuelta, cuando el bocadillo de nueve o diez capas de tela, relleno y forro no me cabía por el agujerito dejado para tal efecto.



Pero al final lo conseguí. Lo planché todo, le puse su gancho carabina profesional, y listo.


Ya puestos, me lancé a hacer el cambiador. La autora te pide una tela de vinilo que va forrada por detrás con tela a juego. No había vinilo en mi almacén local, ni nada que se le pareciese, a no ser el hule con estampado de tomates tipo mantel de camping de toda la vida. Así que la vendedora, con los ojos brillantes y expresión de loca, me vendió un plástico adherente para que lo planchase encima de la tela.
De perdidos al río, pensé, y me puse manos a la obra.



Recorté y planché el plástico, pegándolo a una tela blanca de loneta que me ajencié en IKEA (80 cm, dos euros) y luego lo forré con la tela buena por detrás. Un filo a todo lo largo, unos pespuntes, y listo.


Me quedó algo arrugado por la parte buena, la de algodón, y estuve a punto de cabrearme, pero luego pensé: "Hija mía, estás cosiendo plástico, ¿qué querías?" y decidí no ser tan perfeccionista. Una vez planchado el cambiador y doblado por las costuras, se queda divino.


¿Se observan los detalles profesionales? Carabina, cierre metálico, cambiador a juego... La tela de fuera es de Amy Butler, con un fat quarter (50x50cm) he tenido suficiente, menos mal porque es cara. La del forro es una tela de patchwork que me sobraba. La del cambiador es una de algodón, 9,90 euros/m.


Voilá!
Veredicto: fácil de hacer, aunque a veces no te dice si la capa correspondiente va boca arriba o boca abajo. Y con tantos pasos individuales tiende una a liarse. Pero cada paso es facilito, y hay esquemas para aclarar las dudas. Hay que saber inglés, eso sí. En suma, un proyecto para principiantes que te llevará unas 3 horas, y que luce muchísimo porque nadie tiene un bolso así. Ideal para llevar colgado del asa del cochecito donde lo vean todas.